OSTEOPATIA

¿Hay diferentes tipos de osteopatía?

Según el origen del dolor o la disfunción, podemos hablar de tres bloques dentro de la Osteopatía: Osteopatía estructural, visceral y sacro-craneal.

OSTEOPATÍA

Técnica de Osteopatía Estructural

Osteopatía Estructural:

La osteopatía estructural se enfoca en las disfunciones músculo-esqueléticas, y articulares. Nos ayuda a tratar muchas patologías como lumbalgias, ciatalgias, contracturas musculares, vértigos, mareos, cefaleas tensionales y, un largo etcétera. Algunas de las técnicas más utilizadas en una sesión de osteopatía estructural son las siguientes:

  • Estiramientos musculares y faciales
  • Técnicas de bombeo para los ligamentos y cápsulas articulares
  • Técnicas de Thrust (técnica de alta velocidad y corta amplitud)
  • Técnicas Funcionales
  • Técnicas de inhibición de los punto gatillos musculares
  • Stretching

 

osteopatía visceral

Osteopatía Visceral

Osteopatía Visceral:

Trata de eliminar la rigidez estructural mejorando la movilidad y motilidad visceral a la vez que estimula tanto su vascularización como su inervación.

Tenemos que tener en cuenta que todas nuestras vísceras están ancladas a una estructura ósea a través de ligamentos y fascias (de ahí la importancia de que exista una buena movilidad del aparato locomotor para no crear disfunciones o falta de movilidad a la víscera), pero además, están unidas unas con otras a través de mesos, epiplones y ligamentos. Todas esas estructuras son analizadas y tratadas en esta disciplina, con el fin de restablecer el movimiento natural de la misma y a su vez, su correcto funcionamiento.

Hay que señalar que en ocasiones el paciente acusa dolor musculoesquelético referido por el mal funcionamiento de una víscera. Es decir, que el dolor es «referido» a nivel muscular pero el «origen» es visceral.

 

osteopatía sacro-craneal

Osteopatía Sacro-Craneal

Osteopatía Sacro Craneal:

Esta última es una técnica sutil y de efecto profundo que ayudar a detectar y corregir los desequilibrios del sistema cráneo-sacral que puedan ser la causa de disfunciones sensitivas, motoras o neurológicas.

Su creador, el Dr. Sutherland basó la terapia de la osteopatía craneal en técnicas en torno al mecanismo de contracción-expansión rítmica del cerebro, al que llamó “movimiento respiratorio primario”, que es lo que permite que el líquido cefalorraquídeo (LCR) circule con facilidad y libertad a lo largo de las meninges.

El MRP está constituido, según Magoun y Sutherland, por los siguientes factores:

  1. Motilidad (movimiento inherente) del cerebro y de la médula espinal.
  2. Fluctuación del líquido cefalorraquídeo.
  3. Movilidad de las membranas intracraneales e intraespinales.
  4. Movilidad de los huesos del cráneo.
  5. Movilidad involuntaria del sacro entre los dos huesos de la pelvis.

Este Movimiento Respiratorio Primario (MRP) se denomina así puesto que:

  • Es un movimiento respiratorio porque consta de dos fases como la respiración pulmonar: flexión o inspiración y extensión o espiración
  • Y es movimiento primario porque existe antes de dicha respiración y desde que somos embrión

La terapia sacrocraneal esta enfocada a eliminar cualquier obstáculo que entorpezca  la libre circulación y ritmo apropiado del MRP.

Mareos, vértigos, ansiedad, depresión, dolores de cabeza, de cuello, de  sacro, afecciones del trigémino, disfunción de la ATM…son síntomas o manifestaciones de un posible desequilibrio en las estructuras que intervienen en este MRP.